La organización criminal “Patricio” vendió en 21 mil dólares a 30 de sus trabajadores, los cuales fueron comprados en efectivo por rancheros de un campo en Indianápolis, quienes desembolsaron 700 dólares por cada “esclavo”.
Una investigación realizada por el medio informativo MILENIO, basada en la consulta de documentos judiciales albergados en las cortes estadounidenses, revela que tan solo uno de estos grupos delictivos obtuvo ganancias por 200 millones de dólares en cuatro años.
Los expedientes también muestran el modus operandi de las mafias que comercian con migrantes: luego de que cruzan la frontera, suelen robarles identificaciones, papeles personales y recaban información sobre sus familias en México u otros países. Así los amedrentan para que no escapen.
Esta organización criminal durante años operó bajo la fachada de una agencia de contratación de migrantes.
Sin embargo, su reinado criminal terminó en 2019, cuando más de 200 policías norteamericanos montaron el operativo Cebolla Floreciendo, para seguirles los pasos y dar con su paradero.
Con estos actos criminales, “Patricio”, construyó un negocio millonario gracias al trabajo de decenas de personas que fueron obligadas a trabajar en campos de cultivo de Estados Unidos.
Con información de: Milenio.com